lunes, 7 de junio de 2010

Mil y una.

Quizás tengas razón. Y puede que tenga mil razones para no quererte.
Porque eres una persona insegura, que no piensas las cosas que dices.
Tal vez, porque seas demasiado cobarde, y cada vez que puedes, intentas huir de los problemas, sin importarte a quien hagas daño.
Porque primero piensas en ti, siempre en ti...
O porque cuando se te mete una idea en la cabeza, no hay quien te la quite.
Porque tardas en ducharte dos horas, y me tienes esperándote...como siempre.
Quizás, una de las razones mas evidentes sean, que cada vez que prometes algo, nunca se hace realidad.
Hoy quieres algo, mañana lo contrario.
Si hoy te gusta el blanco, mañana, te gustará el negro.
Puede que seas algo mentiroso, vengativo, egoísta, rencoroso, y un poco manipulador....

Y es que de vez en cuando te contradices...y también porque me haces quererte pese a todo.
Y sobre todo odio cuando me dices que luego me llamas, y me paso horas con el teléfono en la mano, mirándolo a cada segundo, y nada.
Parece que te haces de rogar. Y yo siempre insisto.
Pero lo que más odio de ti, es que de verdad, haces que me crea que me quieres...
Y que cada vez que me dices que quieres estar siempre conmigo, te creo.
No me gusta cuando un día lo tienes claro, y al otro no. Y cuando me haces desconfiar.
Cuando te crees, que soy vengativa, y que te voy a hacerlo pasar mal...
Porque sí, te equivocas.


Pero, ¿Sabes qué? podría seguir escribiéndote mil razones por las que no tendría que quererte. Pero seria una tontería, porque se, mil y una razones por las que te quiero.


Porque te veo aparecer cuando hemos quedado, y siempre vienes con una gran sonrisa, me das dos besos, y me dices, " ¡YA! que me a dado un poco de asco" y nos reímos...
También porque cuentas esas historias, que no tenemos muy claro porque surgen y nunca tienen un final emocionante, pero cuentas cada detalle y cada tontería, como si estuviese pasado en ese mismo momento.
Es que, cuando te veo, siento que cada una de las partes de mi cuerpo se pone nerviosa.
También, porque nunca dejas de sorprenderme, porque siempre tienes algo nuevo para hacer o algo nuevo que contar.
Porque me gusta cuando miras un vídeo, y te concentras y pones tu cara de pensar, y no puedo evitar mirar cada una de tus expresiones.
O quizás porque el día que menos lo espero, me acompañas hasta casa, sin un porqué y sin esperar nada a cambio.
Y porque me gusta cuando te sales de la ducha y te echas desodorante y no me dejas que te vea lavándote los dientes, y te miras a el espejo 3.000 veces antes de salir de casa, y otras 3.000 en el ascensor.
Cuando me miras, y me dices..." Ay, si yo quisiera y tu te dejaras..."
Porque haces que tenga sentido levantarme cada mañana, con tal de mirar el móvil, y ver si tengo alguna llamada tuya, y para probar suerte, haber si ese día nos podemos ver...
A lo mejor, otra razón seria que cuando estoy contigo, no me importa nada mas. Se que eso suena como lo típico que se dice...pero es así, cuando estamos juntos te puedo contar todo lo que se me pasa por la cabeza, sin miedo a que me mires mal, o a arrepentirme luego.
Y es que me encanta tu cara recién levantado, cuando intento despertarte y te mueves y metes la cabeza debajo de la almohada, y me dices que soy una pesada...
Sobre todo, cuando me miras con esa cara...y consigues que me ponga realmente nerviosa, y no puedo evitar dejar de sonreír como una tonta.
Porque adivinas lo que estoy pensando, y cuando lo digo, me dices: "Sabia que ibas a decir eso.." y te ríes.
Porque resulta que si de verdad, lo ojos son el reflejo del alma..tu debes de tener el alma más bonita del mundo..
Otra razón, es porque cuando sonríes se te ponen esas arrugitas en la comisura de los labios...y cuando te ríes, pero de verdad, cuando no finges...te brillan los ojos.
O tal vez, porque sabes decirme las palabras justas en el momento oportuno, y cuando necesito reírme, consigues que lo haga, y cuando necesito que me escuches y te pongas serio, lo haces...
¿Sabes que otra razón tengo? Que contigo nunca se sabe lo que puede llegar a pasar.
Que si te pido algo, no dudas en dármelo, y porque mis problemas se vuelven los tuyos.
Y una mañana, sin un motivo coherente, me envías un mensaje de buenos días.
¿Otro motivo? el olor de tu ropa, de tu perfume...
Cuando de verdad me das un beso, porque te sale de dentro, de lo más profundo, y sin darnos cuenta, estamos otra vez embarcados hacia otra aventura...
Porque cada vez que estoy contigo, no puedo evitar volver a casa con una sonrisa de oreja a oreja.
¿Qué porque? Porque eres la única persona que sabe hacerme totalmente feliz.
Y cuando te miro, lo único que se me pasa por la cabeza es que quiero estar así, siempre, contigo.


A la hora de la verdad, todas las mil razones que tengo para no quererte, no valen de nada.
Porque, es pensar en una de todas las otras que tengo para quererte, y todo se me borra.


¿Y sabes qué? Esto, no es algo que piense hoy, ni ayer, ni antes de ayer...lo pienso desde hace 5 años, y lo seguiré pensando hasta que me muera.


Gracias por, a tú manera, hacer que me sienta especial.



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